Hígado graso no alcohólica

Hígado graso no alcohólica

Una enfermedad estrechamente vinculada a la crisis de la obesidad, es un fuerte factor de riesgo para la enfermedad cardíaca y la diabetes tipo 2, y en casos severos puede conducir a insuficiencia hepática. No existen pautas dietéticas oficiales para tratarla. Pero si ciertos alimentos pueden curar la enfermedad es un tema que está atrayendo cada vez más atención de los científicos.

Los investigadores han puesto en duda la participación de un número de factores dietéticos - grasas trans, aceites omega-6 , los alimentos fritos y fructosa, por nombrar algunos. Pero uno que ha atraído quizás la mayoría de la atención es el azúcar, en parte porque se metaboliza en el hígado y que se sabe que aumenta los niveles en sangre de triglicéridos, un tipo de grasa.

Los estudios sugieren que el consumo de azúcar contribuye a la acumulación de grasa en el hígado. Y hay algunos datos que indican que las personas que llevan las variantes genéticas asociadas con el hígado graso son particularmente sensibles al aumento de la acumulación de grasa en respuesta al azúcar y los carbohidratos refinados.

Una de las primeras piezas de consejos dietéticos que los médicos que tratan a hígado graso dan a sus pacientes es eliminar las bebidas azucaradas de sus dietas. Pero los médicos dicen que los pacientes con la enfermedad son típicamente consumen demasiadas calorías de todo tipo, no sólo el azúcar.

A menudo, los pacientes se les dice que eviten el consumo de alimentos muy procesados, que son fáciles de consumir en grandes cantidades y por lo general despojados de su fibra y otros nutrientes naturales. Los estudios preliminares han encontrado hasta el momento de que los pacientes de hígado graso responden bien a la dieta mediterránea, que incluye un montón de productos frescos, nueces, aceite de oliva, carne de ave y pescado.

Un pequeño ensayo clínico publicado el año pasado encontró que una dieta mediterránea tenía un impacto más favorable sobre la grasa del hígado y la resistencia a la insulina que una baja en grasas, dieta alta en hidratos de carbono. Y otro estudio , que involucró a 90 pacientes con sobrepeso con hígado graso, encontró éxito similar con un enfoque mediterráneo.

Dado que la financiación para la investigación de hígado graso crece, los científicos esperan llevar a cabo estudios de intervención más la dieta.

En este momento, el único método probado de reducción de grasa en el hígado es la pérdida de peso. Los doctores con pacientes hepáticos grasos apuntan a una pérdida de peso inicial de al menos 10 por ciento de su peso corporal, que puede lograrse mediante la limitación de la comida chatarra y la práctica de ejercicio regular.